Impresiones de Manejo - CITROËN New C4, la séduction d'automne

Llegado directamente de Francia, nos dejamos seducir por el espíritu parisino del New C4, manejándolo entre los primeros fríos y el colorido típicos de nuestro clima otoñal.

Desde aquella primera versión nacida en el 2004 y que AutoAnuario conoció en el Salón de San Pablo de ese mismo año, mucha agua ha corrido bajo el puente. Dicho de otro modo, el modelo inicial del Citroën C4 fue pasando por distintas transiciones con el correr de los años, experimentando una evolución sobre el modelo original.

Aquellos primeros modelos impresionaron por la audacia de sus líneas. Cabe recordar por ejemplo la versión 5 puertas que se ofrecía con dos opciones de diseño en el sector trasero: uno con el portón del maletero curvo y otro rectilíneo.

En abril de 2007 nace el sedán diseñado, desarrollado y producido en la planta de El Palomar, calificado en su momento por el ex presidente Kirchner como el orgullo argentino. Además de su presencia basada en un estilo propio de gran personalidad, el nuevo auto se destacó entre otras cosas por el original sistema del volante, que mantiene el centro fijo mientras que la dirección responde al movimiento del aro externo.

NEW C4 SEDUCCIÓN

De origen francés, llegó al mercado uruguayo en el transcurso del Motorshow montevideano, evidenciando algunos cambios importantes respecto a su generación anterior. La primera impresión es que sus nuevas líneas acentúan una expresión de elegancia y sobriedad de alto calibre. Si bien el frontal mantiene el espíritu de los demás modelos de la marca, con el logo formando parte de la parrilla de 2 elementos y los faros alargados, éstos no avanzan tanto hacia las aletas y todo el conjunto, incluyendo el gran paragolpes, ofrecen una imagen compacta y una mirada fuerte.

El parabrisas es de gran tamaño y tiene una inclinación importante, integrándose a una amplia curvatura del techo que se abre hacia la parte posterior del auto. Aquí es donde se ven las mayores diferencias de diseño comparado con los modelos anteriores, pues si bien las líneas son más convencionales, incrementan notablemente su elegancia.

El remate del techo corre por cuenta de un alerón, que forma parte del portón trasero trapezoidal, algo menos inclinado y que a su vez contiene parte de los enormes faros bi partidos y envolventes.

La vista de perfil mantiene la cintura alta y una amplia superficie vidriada. Con sus 4,329 mts, crece 6,9 cm de largo respecto a su versión anterior. Cabe destacar el llamativo diseño de las llantas rodado 16, sin dudas muy elegantes, y los enormes espejos retrovisores que, heredados del C5, hacen un buen diferencial a la hora de manejar.

UN MUNDO INTERIOR

El cómodo acceso asegurado por la amplitud de las puertas y la buena altura del auto, nos despliega un paisaje interior bien agradable. Instrumentos claros, sin sobrecarga de comandos, detalles en cuero en el volante y freno de mano, delicados apliques de aluminio pulido en panel y puertas, materiales de buena calidad muy agradables al tacto, excelentes terminaciones y asientos con espuma de alta densidad tapizados con finos tejidos, generan una linda sensación de bienestar.

En el New C4, el volante vuelve al sistema convencional, conteniendo los controles de la radio y del limitador y ajuste de velocidad crucero. En la parte inferior tiene un aplique de aluminio que interrumpe el diámetro de la circunferencia. En pocas palabras, es como un tramo de volante más recto, que a la hora de maniobrar resulta muy cómodo.

Ambos asientos delanteros admiten todos los ajustes posibles, inclusive el lumbar. Además de la excelencia en la visibilidad hacia todos lados, la posición de manejo es óptima gracias también a la regulación del volante en altura y profundidad. Hay un muy buen espacio para los pasajeros de ambas plazas, quedando en claro el beneficio de su mayor longitud y de la distancia entre ejes, que es de 2,608 mts.

La capacidad del baúl bajo bandeja, se ubica en los 380 lts. Un detalle llamativo es el sistema del freno de mano, que no es la palanca tradicional sino que utiliza un vástago que mediante un desplazamiento longitudinal, activa o desactiva el freno. La particularidad es que estando activo, queda en una posición relativamente alta.

Otro elemento original es el dispositivo para la apertura del capó, que se encuentra en el marco de la puerta del conductor y por cierto, queda oculto mientras está cerrada.

El interior del New C4 cuenta con varios guardaobjetos que incluye uno cerrado debajo del display central, y otro muy grande que está debajo del posabrazos. Se levanta la parte superior, que oficia de tapa, y además es deslizable, por lo cual el conductor decide si quiere utilizarlo o no. Por otra parte, la guantera es enorme.

EN MARCHA

La unidad del Citroën New C4 que gentilmente nos ofreció la gente de Citroën Uruguay, fue de la versión 1.6 VTI Seducción, cuyo motor es de 4 cilindros, 1.598 cc de cilindrada con inyección electrónica multipunto y 16 válvulas con distribución variable. Es capaz de producir 120 CV de potencia y un torque de 16.2 kgmf a 4.500 rpm. La planta motriz está asociada a una caja de cambios manual de 5 velocidades, aunque en la versión BVA se ofrece con transmisión automática.

Al girar la llave de encendido se ponen en actividad todos los indicadores del tablero que combinan números digitales, esfera analógica de aguja y barras móviles de color, a la vieja usanza de algunos coches europeos de los años 70.

Tenemos entonces que el reloj de la izquierda es el cuentavueltas, con una barrita naranja que se mueve en sentido circular conforme varían los giros del motor. Con el auto en movimiento indica también a través de un gran número, el momento adecuado para efectuar el cambio de marcha.

Al centro, el de mayor tamaño, contiene varias señales luminosas como la del control de crucero, y números con la información del cuentakilómetros total y parcial. En el medio se destaca un número muy grande, más que el de los cambios de marcha, que es el velocímetro. Esta información se repite en la esfera de la circunferencia con el sistema analógico convencional, mediante una pequeña aguja indicadora.

Finalmente el de la derecha tiene el indicador del nivel de combustible en el tanque también mediante la barrita naranja, además de la información de la computadora que se reitera en el display central, junto a los datos de la radio, la hora y temperatura exterior.

Moderando, el sonido del motor es imperceptible al punto de no percibirse si está encendido. Después de acelerar, inmediatamente se nota la buena disposición del torque a bajas revoluciones, con una relación de marchas bien cortas. A tal punto, que se podría prescindir perfectamente de la primera velocidad pues en segunda es capaz de vencer la inercia inicial sin someter el motor a ningún tipo de sacrificio.

No tardan en surgir algunos atributos destacables. Mantiene un alto nivel de insonorización gracias a la buena calidad de la aislación acústica, aunque en régimen alto se percibe un poco más el ronquido del motor, que igualmente, emite un sonido disfrutable. La elasticidad del propulsor ofrece una gran comodidad para transitar dentro de la ciudad.

El auto se comporta muy docilmente, con eficientes respuestas a las órdenes de los comandos. La ergonomía es adecuada, con un instrumental que ofrece además toda la información necesaria con absoluta claridad.

Asignamos también un puntaje alto al sistema de suspensión, perfectamente calibrado, que transmite una gran suavidad de marcha en condiciones normales de circulación. Pero aún en las otras, con calles deterioradas, no produce golpes ni provoca sacudones bruscos a sus ocupantes.

En la carretera vuelven a manifestarse nuevas virtudes, pues es llamativa la forma en que se planta sobre el piso. Impecable estabilidad y excelentes respuestas a la hora del sobrepaso son prestaciones imprescindibles para generar seguridad durante los viajes. El limitador y el control de velocidad crucero se vuelven importantes cuando los recorridos son muy largos.

El interior se mantiene siempre muy confortable en cualquier condición, pues se suman la eficiencia del climatizador automático, la ya mencionada insonorización y una óptima distribución del audio del sistema de sonido a través de 6 parlantes estratégicamente ubicados.

Durante la noche, el sistema lumínico es altamente eficaz con faros halógenos regulables eléctricamente. Por dentro, los comandos se iluminan con un tenue naranja, mientras que en el panel los instrumentos tienen una aro de luz blanca en su perímetro, facilitando la visión. El ambiente resulta muy cálido y agradable.

Aquí también el New C4 incorpora un elemento interesante, como lo es el mecanismo autodireccional de los faros antiniebla, mediante el que acompañan la curvatura de la ruta iluminándola adecuadamente.

Para mencionar otros componentes del equipo de serie, viene con vidrios y espejos eléctricos, bloqueo automático en movimiento, bloqueo central, follow me home, luces interiores con retardo, frenos con ABS, AFU (asist. para el frenado de urgencia), REF (repartidor electrónico de frenado), 6 airbags, radio/CD con MP3 y mando a distancia, etc.

En conclusión, el Citroën New C4 francés es un auto con un alto nivel de calidad. Tanto por su presencia como por sus atributos y equipamiento, invita constantemente a manejarlo, ofreciendo una sensación de seguridad permanente.

La moderna tecnología de su nueva motorización ofrece notables prestaciones con un consumo de combustible muy económico. Sin realizar una medición exacta pero en función de los kilómetros recorridos y tomando en cuenta la información del fabricante, a 90 km/h el rendimiento ronda los 20 km/lt.

Es un auto atractivo que pudimos disfrutar ampliamente durante algunos días de clima otoñal, con algo de lluvia y frío, típicos de nuestro mes de mayo.

Definitivamente el New C4 Seducción, que así es su denominación comercial, es seductor. Y para nosotros, un seductor otoñal.

Publicado: 17/05/12 - 18:00 hs. - Textos: Luis Piedra Cueva (miembro de APUM, Asociación de Periodistas Uruguayos del Motor) - Fotos: Leticia Carbajal y Luis Piedra Cueva.